Para la mujer actual, que pasa largas horas frente a una computadora o tiene varias obligaciones diarias que cumplir, no hay nada más recomendable que tomarse un tiempo, por lo menos tres veces a la semana, para realizar ejercicios. No sólo para mejorar la figura, sino también como una forma de relajar el estrés acumulado.

Existen muchas rutinas de ejercicios, tanto aeróbicos, como con aparatos, de distintas categorías. Una de las preferidas actualmente es el Método Pilates.

Aunque este método lo desarrolló Joseph Pilates en New York, en los años 20, recién hace unos años es que se fue perfeccionando y valorando como técnica preventiva y terapéutica, utilizado en casos de problemas artríticos y musculares.

Se trata de un método de ejercicios basados en la flexibilidad y la respiración. Toma en cuenta la concentración (necesaria par ala coordinación), el control, la fluidez de los movimientos, la precisión y la respiración. Se realiza con movimientos suaves y lentos.

Se realiza a partir de posiciones básicas y contro del equilibrio del cuerpo. Existen distintas corrientes del pilates, todas basadas en el pilates clásico u original, que se pueden realizar con o sin la ayuda de aparatos o balones.

Más que un tratamiento para adelgazar, es una técnica de modelado corporal que combina gimnasia, yoga, ballet e higiene de la columna basado en movilidad articular. A continuación unos ejemplos de ejercicios:

Ejercicio 1
Acostada, con los brazos extendidos a lo largo del cuerpo, elevar las piernas. Dejando la espalda pegada al piso, abrir y cerrar las piernas muy lentamente. (8 veces)

Ejercicio 2 
Sin dejar que el abdomen tome contacto con el piso en ningún momento y manteniendo la cabeza algo elevada, elevar el torso extendiendo los brazos al máximo (6 a 10 movimientos).

Ejercicio 3 
Sentada en el suelo, tomar las canillas con ambas manos, mientras balancea el cuerpo hacia atrás y adelante. Este ejercicio es para aliviar las tensiones.(3 minutos).