La etapa más crítica de cualquier dieta que funciona es el mantenimiento de peso obtenido. Estudios demuestran que luego de adelgazar debemos estar pendiente con una rutina para no recuperar esos kilos demás.

Aunque al principio seguir con una dieta puede ser una odisea al final nuestro cuerpo se acostumbre a lo que le demos (varia de persona en persona), es por eso la importancia de seguir y cumplir con un régimen luego de hacer una dieta. 

Un estudio se hizo en una Universidad de Columbia demostrando que para mantenerse en el peso ideal se debe reducir un 22% las calorías consumidas lo que normalmente rondan las 3000 calorías durante años para estar en el peso correcto.

Luego en una conferencia se confirmó que después de una dieta los músculos necesitan menos calorías y hay que suministrar la cantidad adecuada.

Estos estudios confirman que las dietas además de bajar de peso influyen notablemente en los músculos, mejora el ánimo y cambia el ritmo de actividad cerebral.